Podrían dejar sin luz al Zulia
Las 12 torres que atraviesan el lago están sufriendo por la corrosión que hace estragos causando graves daños en su estructura, lo que podría generar el colapso y tumbarlas, dejando sin electricidad a todo el estado
Por: Rafael David Sulbarán. Periodista.
Habla bastante. Come bastante
¿Se imaginan que el Zulia se quede sin electricidad completamente? Bueno, está posibilidad está muy latente debido a las graves fallas en el mantenimiento de las estaciones, plantas y algo quizá inesperado: las torres que componen el Sistema Interconectado Nacional que abastece desde el Guri a todo el estado con al menos mil megavatios.
¿Cómo es posible esto? Bueno, debido a la falta de mantenimiento las torres, sobre todo las 12 que atraviesan el Lago de Maracaibo, presentan una fuerte corrosión, y el acero galvanizado del que están construidas está cediendo, expuesto a las condiciones lacustres. Desde hace rato no se le hace el mantenimiento preventivo requerido, y por esta razón se corre el riesgo de que alguna colapse y se venga al suelo, dejando al Zulia sin servicio eléctrico Dios sabe por cuánto tiempo.
Desde el Caroní llegan estos mil megavatios que se conectan desde el una subestación en el estado Yaracuy, arrancando entonces con los 335 kilómetros que atraviesan también Lara y Falcón, llegando hasta la subestación El Tablazo, cerca del complejo Petroquímico Ana María Campos, para emprender el recorrido de 8.5 kilómetros sobre las aguas del lago, distancia similar a la del puente Rafael Urdaneta. La subestación Cuatricentenario recibe las cargas que son procesadas para toda la región.
En total son 790 torres. Sobre el lago hay tres tipos de estructura, la AC 30 de 33 metros de altura, la A55222 de 70 metros y la SC1400 con una altura de 150 metros. Todas están presentando fallas en su composición, sobre todo en las bases.
Investigación
Desde hace varios años el Centro de Ingenieros del Zulia (Colegio de Ingenieros) y la Universidad del Zulia han monitoreado todo el sistema eléctrico del estado, realizando una investigación que ha dejado resultados preocupantes, sobre todo por la situación de las torres. Este jueves, tuvimos la oportunidad de asistir a una rueda de prensa donde Marcelo Monnot, presidente del Colegio de Ingenieros y Ciro Portillo, ex presidente de Enelven, expusieron lo grave de la situación eléctrica actual.
“Estamos en emergencia eléctrica desde 2010 por la falta de mantenimiento en las diferentes estaciones, por eso hay que tomar las cartas en el asunto”, comentó Portillo, que dirigió la empresa zuliana de electricidad Enelven que estaba encargada de realizar las refacciones de las torres “Y desde que entró en funcionamiento Corpoelec, se han olvidado de eso y se está viendo gravemente afectado todo el sistema”, dijo preocupado.
Por su parte Marcelo Monnot explicó que las condiciones del lago aumentan la exposición a la corrosión “El acero debería tener al menos un revestimiento de seis capas de zinc, y por su exposición a las condiciones del lago, en un cuarenta por ciento aumenta la posibilidad de debilitamiento por corrosión”, comentó el ingeniero, agregando que un ventarrón o una tromba en el lago podría tumbar una de estas torres, ¿y qué pasaría? Se dejarían de recibir más del 80 por ciento de los megavatios que se usan actualmente en el estado.
El Zulia actualmente tiene una capacidad instalada para 2800 megavatios, solo se produce 1200, cerca del 50 por ciento, y entonces la dependencia del sistema interconectado es muy alta, por lo que se quedaría el Zulia, o gran parte de él sin luz.
Estas gráficas que vemos de las torres son cortesía del equipo de prensa del Cidez que nos las facilitaron. Son de las visitas que han realizado, la última de ella en junio de 2015. Nosotros quisimos llegar hasta las torres para tener nuestras propias imágenes. El acceso desde tierra por la Costa Oriental se realiza desde Punta de Palmas o desde la Ciénega Los Olivitos, un reservorio natural que alberga más de 136 especies, entre ellos los llamativos flamingos.
Nos acercamos hasta la orilla del lago, donde se supone, deberían salir lanchas para llevar a turistas en paseos por la laguna, por supuesto nuestra intención era acercarnos hasta las estructuras para constatar su estado actual, pero no había ni un alma en la playa, ni una lancha, ni balsa, ni un policía, tampoco algún representante en la sede del ministerio de ambiente ubicado allí, ni el perro guardián nos ladró. A lo lejos observamos una lancha privada en otra playa, pero alertados por algunos lugareños del pueblo o caserío “Ancón”, que sirve de anfitrión a Los Olivitos, desistimos de alquilar una lancha de esas, ya que corríamos el riesgo de ser atracados, secuestrados o abordados por la guardia costera, que podría quitarnos nuestras cámaras y celulares. Vale destacar que por esa zona el contrabando de drogas, cigarros, alcohol y alimentos, está a flor de piel.
Racionamiento adelantado
Son muchos los problemas del todo el sistema, esto ha generado cortes adelantados, que ante se daban con mayor frecuencia entre abril y mayo, los meses de mayor demanda, que en los picos llega a 3100 megavatios. Pero desde enero los zulianos están viviendo racionamiento programado. La razón es por el recalentamiento de los transformadores que se encuentran ubicados en la subestación Cuatricentenario, “Lo que obliga a Corpoelec a tener que racionar, para así evitar más daño en los transformadores que están muy malos desde hace meses”, explicó Monnot.
Dentro de las soluciones que se han presentado están el poner en funcionamiento las plantas termoeléctricas en el Zulia. “Dependemos demasiado de la hidroeléctrica, y nosotros tenemos la capacidad física y humana para generar energía por otros medios. Acá se han invertido millones en plantas termoeléctricas, pero ninguna funciona a su capacidad o están en construcción. Deberíamos emular el sistema colombiano, que pese a la crisis del fenómeno de El Niño, tiene la capacidad para abastecer la demanda basándose en la generación termoeléctrica”, comentó Portillo.
Estas soluciones y la investigación completa han sido presentadas ante el gobierno nacional y un documento especial al gobernador Francisco Arias Cárdenas, pero no han tenido respuesta alguna, “Se le presentó al gobernador todo el resultado del estudio de las torres, pero sencillamente se quedó sin palabras, se lo embolsilló y no hemos tenido ni una señal”, comentó Monnot.
Denuncias desde la AN
¿Pero cómo poner a funcionar estas plantas si hay corrupción de por medio? Es todo un reto sin duda. Pero Tal vez haya una luz que destape los desfalcos a la nación en materia eléctrica. Recientemente el diputado por la MUD del Zulia y vicepresidente de la Asamblea Nacional enrique Márquez brindó unas declaraciones, presentando una grave acusación sobre la adquisición de plantas y equipos en sobreprecio, por lo que el hemiciclo empezará una investigación profunda. “Con respecto al sector eléctrico el pueblo paga las consecuencias con apagones consecutivos en diversas zonas del estado Zulia, las personas se preguntan ¿si hay tanto dinero y se dice que se ha invertido tanto en plantas por qué no hay electricidad? El dinero no fue invertido y se lo tomaron para ellos”, expresó Márquez, exponiendo lo siguiente:
- El 81 por ciento de las plantas eléctricas instaladas en Venezuela fueron vendidas y pagadas como nueva y eran usadas, como ejemplo está la de Termo Zulia 4, estuvo nueve años de uso en una planta gringa y la trajeron para venderla como nueva.
- Son varias empresas implicadas, entre ellas está ProEnergy Services y Derwick Associates, ambas contrataron 14 proyectos donde le entregaron cuatro mil 576 millones de dólares por la instalación de tres mil 516 megavatios, indicó que si esas obras la hubiesen contratado en cualquier otro país solo hubiesen costado mil 900 millones de dólares, teniendo un sobreprecio de dos mil 933 millones de dólares.
- Otro ejemplo es el de la planta Hidroeléctrica de Tocoma, desarrollo del bajo Caroní en la que aparece la empresa brasileña ODEBRECHT, informaron que la iban a construir por 10 mil 731 millones de dólares y ya van por 12 mil millones de dólares y lo que vale son tres mil 200 millones de dólares “y no lo digo yo, si se le pide a la empresa un presupuesto para hacerla en Argentina dicen que cuesta eso. Aquí tiene un sobreprecio de siete mil millones de dólares”, explicó.
- En La planta el Picure se instaló un equipo que costó 185 millones de dólares dijeron que era nuevo pero existe la evidencia que tenía doce años de utilización y debido a su condición costaba 60 millones de dólares, siendo este el primer contrato que hicieron las empresas ProEnergy y Derwick. Las empresas ejecutaron la venta de 42 turbinas más de las cuales 81 por ciento tenían más de ocho años de uso y los cobraron como nuevas.
- La empresa Corporación Venezolana de Guyana (CVG) le compró cinco turbinas a las mismas empresas porque estaban conectadas con la presidencia de Petróleos de Venezuela S.A. (PDVSA), con el ministro de Energía Eléctrica y Corpoelec, en la operación Derwick obtuvo 28 millones de dólares de comisión y en cuatro años no se ha podido prender ni un solo equipo porque no hay gas combustible.
- Indicó que es un saqueo en el sector eléctrico, aunque el ministro actual dice que falta por invertir más y tiene previsto hasta el 2019 siete mil 500 megavatios a un costo de 25 mil millones de dólares ya tienen un sobreprecio anunciado del 100 por ciento.
“Le exigimos a Corpoelec y al Ministerio de Energía Eléctrica que rindan cuentas, no es casualidad que desde el 16 de noviembre del año 2010 la página web está fuera de servicio, allí se veía cuánto generaba cada planta, exigimos la información oportuna y una auditoría profunda de todo el período de emergencia eléctrica para detectar las irregularidades”, finalizó el diputado.
Entonces vemos esto y podremos decir, que será muy cuesta arriba que le hagan mantenimiento a todo, menos a las torres y transformadores zulianos, mucho más con la falta de divisas…bueno ojalá y no digamos pues: “Adiós luz que te apagaste”.
Texto publicado en El Pitazo el 08-02-2016
Con la colaboración del Centro de Ingenieros del Zulia (Cidez)
Fotos: Cidez, Rafael Sulbarán