Una bomba de tiempo
Según denuncia el personal, la estatal petrolera viola los protocolos de seguridad todos los días, tal como lo evidencia un accidente ocurrido el pasado 22 de julio en Bachaquero
Por: Rafael David Sulbarán. Periodista.
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En el lago de Maracaibo hay alrededor de cinco mil pozos entre activos e inactivos, según cifras de organizaciones ecologistas como la fundación Azul Ambientalistas. Durante más de 90 años, o en algunos casos hasta un siglo entero, estos yacimientos han sido trabajados día a día, hora a hora, para extraer el crudo, actividad que requiere de rigurosos métodos de seguridad, pero estos no siempre se cumplen, según denuncian fuentes cercanas a la empresa Petróleos de Venezuela (Pdvsa) que pidieron reservar sus identidades.
“El deseo de la empresa es producir lo más que se pueda, ya que el desfalco es tal que no le alcanza para mantenerse a flote y cancelar deudas”, señaló un experimentado trabajador de un taladro de la contratista Schlumberger, quien accedió a conversar con Pluma Volátil, previa exigencia de que se le garantizara el anonimato.
“Si se siguen violando, saltando, obviando los pasos necesarios para la seguridad de los obreros y del pozo en sí, así como de las demás instalaciones, podremos ver una catástrofe, porque a veces en esas gabarras hay hasta 70 hombres. Imagínense una explosión incontrolable y que en el taladro estén tantas personas que, además, carecen de preparación para este tipo de contingencia. El desastre sería similar al ocurrido en Amuay”. Con este análisis empezó la conversación este trabajador, que tiene más de 20 años de experiencia y que conoce muy bien la Pdvsa de antes y la de ahora.
Explosión en Bachaquero
“El accidente ocurrido en Bachaquero el pasado 22 de julio del año en curso se pudo haber evitado. Gracias a Dios no hubo muertos ni heridos graves, pero es una situación que está latente”. El hecho al que hace referencia la fuente es una explosión de gas que acabó con el pozo LV 401 en Bachaquero Lago, quedando 21 trabajadores en peligro y una gabarra totalmente destruida. “La gabarra dañada era la única de Pdvsa que estaba funcionando; las otras siete están paralizadas por falta de repuestos y mantenimiento, y ahora esta quedó inservible”, expresó.
El 22 de julio, a eso de las 9:30 de la noche, los ingenieros de Pdvsa, luego de 15 horas esperando por una empacadura que aísla cualquier tipo de gas poderoso que emane del pozo, decidieron, a pesar de las advertencias de los ingenieros de la contratista Weatherford, llevar a cabo el proceso de cañoneo, que consiste en introducir explosivos en el pozo para dejar libre el crudo y facilitar su extracción.
Allí estuvo el gran error, según nuestra fuente. Advierte que, como parte de los riesgos que enfrentan los obreros a la hora de realizar este trabajo, está que el gas acumulado en la cavidad pueda colarse por la tubería de perforación. Para evitar que ocurra esto, utilizan unas empacaduras que desvían el gas hacia los costados. Una segunda pieza, que evita que el gas salga a la superficie, lleva por nombre válvula BOP o válvula antireventones.
Esa noche las empacaduras no estaban y la válvula BOP no funcionó, ya que estaba mala. La consecuencia fue que un envión de gas con piedras, crudo y lodo hizo fricción y generó una explosión, con el consecuente caos. “Gracias a Dios no pasó a mayores. Pudieron quemarse o sufrir golpes fuertes que los lesionaran. Suerte que estaba cerca una lancha que los pudo rescatar y llevar a tierra firme”, señaló un experimentado jefe de taladro, con más de 35 años de experiencia en rehabilitación de pozos.
Agregó que otro peligro grave que enfrentaron fue el de una intoxicación por gases como el H2S (sulfuro de hidrógeno), extremadamente venenosos. “Muchos se pudieron intoxicar allí, pero la cercanía de esa lancha los salvó. No sé cómo no pasó a mayores esto. Fue un verdadero milagro”, señaló el petrolero.
Cada día se reta a la suerte
“Episodios como este, gracias a Dios, no son comunes. Es lo único que puede salvar a Pdvsa. ¿Pero qué ocurre si tú eres un excelente conductor pero bebes todos los días? Algún día los reflejos te van a fallar, o te quedas dormido y chocas. Así pasa en el lago, se violan todo tipo de normas pensando que lo tienen todo controlado y suceden estas cosas”, explicó el experto.
Diariamente, diferentes empresas contratistas realizan operaciones similares a las del pozo de Bachaquero donde hubo la explosión. Se hacen rehabilitaciones, cementaciones y estimulaciones de pozos, todo como parte del proceso productivo industrial, pero ya Pdvsa, desde el año 2009, viene presentando serias fallas que han comprometido sus operaciones, señalan los afectados.
“Por esta razón, una catástrofe puede ocurrir en cualquier momento, ya que no hay la suficiente voluntad para respetar. Si nosotros paramos un pozo por falta de gasoil u otros elementos nos tildan de traidores a la patria y meten la política de por medio; entonces se arriesgan muchas veces. Por eso el peligro está latente”, explicó el jefe de taladro de la contratista que rehabilita pozos, y agregó que ha mermado su producción considerablemente.
“No hay lanchas, los remolcadores están dañados, no hay gasoil, muchas veces nos hemos parado por piezas. También presentamos problemas de sobrecarga en gabarras, con más de 70 personas en una plataforma que está equipada para 50. En verdad esto es un caos”, insiste.
Pdvsa, según afirma, no reporta los accidentes. “No hacen nada; no informan de los distintos accidentes porque saben el escándalo que se podría armar”. Según nuestras fuentes, semanalmente en el lago se registran entre 5 y 6 accidentes; unos de consideración y otros menores. La cifra total sería de 20 sucesos al mes.
Urge la prevención
Tomando en cuenta los cientos de pozos que se trabajan a diario, podríamos llegar a la conclusión de que otro suceso como el de Bachaquero, o quizá peor, está a la vuelta de la esquina. Pero ¿cómo evitarlo?
“Con mantenimiento y metiendo mano. Pasando la escoba a esos gerentes, a esos encargados de las decisiones que arriesgan la vida de sus trabajadores por ‘no perder tanto tiempo’ y ponen a producir un pozo sin garantizar la seguridad. Se deben adquirir nuevos equipos de protección y hacer muchas cosas, preparar al personal”, reflexionó el trabajador.
Tiempo atrás, en Lagunillas existía el “Pozo escuela” que la industria utilizaba para darles entrenamiento a sus empleados y poder aplicar todos los conocimientos de seguridad y de operación, “pero con la llegada de la nueva etapa en Pdvsa, esto se murió. El pozo escuela fue cerrado. Y el Cied (Centro Internacional de Educación y Desarrollo) yo no sé para qué sirve ahora, creo que para formar políticos. Yo me atrevo a decir que el 99 por ciento de los trabajadores de Pdvsa ignora las medidas de seguridad”, declaró.
Planta Lama
En 2012, se produjo un episodio similar al de Bachaquero. Una explosión de gas en un pozo es el antecedente más cercano al de julio pasado, donde no hubo pérdidas humanas. Ha habido incidentes graves y entre ellos el más recordado fue la desgracia de Planta Lama, el 25 de marzo de 1993. La instalación, ubicada en el centro del lago, perteneciente en aquel entonces a Maraven, hizo explosión y murieron 13 trabajadores. Siete resultaron heridos.
¿Las causas? Una fuga de gas propano alrededor de las 4:30 de la tarde en el bloque 9, acompañada de un chispazo que generó el choque de un metal, probablemente de un contenedor. La fuga no fue detectada a tiempo y no se pudo evitar la tragedia, considerada una de las más graves de la historia industrial del país, solo superada en 2012 por la explosión de la refinería de Amuay, en el estado Falcón.
Los movimientos laboristas de la industria en la época señalaban que Maraven no cumplía con los requisitos mínimos de seguridad industrial y esta planta inyectadora de gas, en el momento del accidente, se encontraba con mucho personal, ya que venía el cambio de guardia. Unas 60 personas estaban en el complejo. Maraven fue muy criticada en su momento. Más de 10 mil millones de bolívares costó la reconstrucción del complejo, pero las vidas de los familiares de las víctimas quedaron en el aire luego de esta terrible tragedia. Piden que la historia no se repita y que se apliquen correctivos.
Publicado en El Pitazo el 16 de agosto de 2016